Por otra parte, se nota que los planes que tiene el gobierno mexicano para este proyecto son bastante ambiciosos, no sólo porque pretenden instalar el centro de operaciones de esta aerolínea en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), sino porque además se hará de unos cuantos bienes como dos simuladores de vuelo, un centro de preparación, un oficina en Ciudad de México y un edificio en Guadalajara, que solían formar parte de la compañía.
¡Abróchense los cinturones!
Otro detallito que tiene pendiente el gobierno es recuperar la máxima categoría de seguridad aérea, que la aerolínea perdió desde mayo de 2021, después de que las autoridades aeronáuticas internacionales realizaran un listado de las diversas maneras en las que no se estaba llegando a los estándares de seguridad aérea de Estados Unidos.
El caso es que ya andan echándole todos los kilos para aprobar estas evaluaciones y así, con la estrellita en la frente, puedan volver a volar los cielos estadounidenses sin preocupación alguna. Eso sí, Pons comentó que esto podrá demorar un par de meses.