Los ataques relacionados con armas son rarísimos en Japón, pero este jueves uno sacudió la ciudad de Nakano. Resulta que un sujeto que llevaba consigo un rifle y un cuchillo le quitó la vida a dos mujeres y dos policías. Tras cometer estos crímenes, el pistolero logró escabullirse de las autoridades para después refugiarse en una casa, donde decidió atrincherarse por un rato, provocando la evacuación de los vecinos a la redonda. Este inmueble era del presidente del consejo de la ciudad, Masamichi Aoki, quien resultó ser padre del agresor. Horas más tarde, pudieron arrestarlo.