Una nueva movida contra las pandillas de El Salvador fue anunciada este martes por el presidente Nayib Bukele. Con el fin de bloquearles los caminos y sus vías de suministro, el mandatario estableció un cerco militar en una zona del centro del país que se llama Cabañas. Esto requirió la movilización de unos 7,000 militares y otros 1,000 policías fuertemente armados. La idea con este cerco humano es cerrarle el paso a los integrantes de las llamadas “maras” para detenerlos en esta región, que según el Gobierno controlan ampliamente.