Últimamente las cosas en Burkina Faso han estado terribles, al grado de que unas 50 mujeres fueron secuestradas entre el jueves y viernes de la semana pasada en el norte del país africano, azotado por la violencia yihadista. Los responsables forman parte de un grupo armado que las capturó a unos kilómetros de la localidad de Arbinda; ellas estaban recolectando frutos para comer. Esto se sabe ya que 10 pudieron escapar para contar lo ocurrido. Fueron dos ataques: uno el jueves, donde se llevaron a 40 y el viernes a 20. De momento, el Ejército sigue buscándolas, aunque todavía no ha dado con su paradero.