No es por espantarte pero...
Cuando el presidente del FEM, Borge Brende, comentó que la reunión en Davos "tendrá lugar en el contexto geopolítico y geoeconómico más complejo en décadas", no estaba exagerando. Y es que, según el Banco Mundial, la inflación actual podría provocar que vivamos unos niveles de pobreza y desigualdad nunca antes vistos desde la Segunda Guerra Mundial.
“Países enteros se encuentran al borde de la bancarrota. Los más pobres destinan cuatro veces más recursos al servicio de la deuda (en manos de ricos acreedores) que a los servicios de salud pública”, lamentó la ONG Oxfam en su informe. Por otra parte, una encuesta anual de riesgos que publicó el FEM el pasado miércoles —11 de enero— estimó que la crisis energética y alimentaria que nos encontramos viviendo podría prolongarse durante los próximos dos años.
Mientras, hay otros que andan pasándola bomba
Curiosamente, a los que mejor les está yendo durante esta crisis económica es a los multimillonarios. Según el más reciente reporte que publicó Oxfam —titulado "La ley del más rico"—, desde que inició la pandemia "el 1% de la población mundial ha acaparado casi dos terceras partes de la nueva riqueza generada en el mundo, casi el doble que el 99% restante". ¿En español? Básicamente, esto quiere decir que durante los últimos dos años, la fortuna de los milmillonarios ha aumentado unos 2,700 millones de dólares al día a nivel global.
Mientras tanto, hay al menos 1,700 millones de trabajadores a los que, durante el mismo periodo, les ha ido como en feria, pues han sido testigos de cómo la inflación superó sus salarios y los despojó de su capacidad para adquirir bienes y servicios.
¡No todo está perdido!
Frente esta situación, Oxfam puso sobre la mesa la campaña #taxtherich en la que se denuncia que los más ricos y las empresas más chonchas se han beneficiado de la actual crisis para aumentar aún más sus patrimonios. Aquí el tema es que no se han interesado por subir los sueldos de sus empleados o han ejecutado mañas fiscales para pagar la menor cantidad de impuestos. Es por ello que el informe propone como solución a este problema que se suba al 75% los impuestos de los multimillonarios y que con el dinero recaudado —que podría alcanzar los 1.7 billones de dólares al año— se ayude a 2,000 millones de personas a salir de la pobreza y se financie un plan mundial para acabar con el hambre.
Del foro al hecho, hay un buen trecho
Y es que todo esto suena demasiado bueno para ser verdad, pues existen algunos países que por más que lo han intentado, no han logrado convertir el sueño guajiro en realidad. Imposible olvidar el patatus económico al que entró Reino Unido bajo la administración de la ex primera ministra Liz Truss, quien intentó darle un tijerazo a los impuestos de las rentas más altas pero lo único que provocó fue un desplome histórico de los mercados financieros. Sin embargo, hay varios gobiernos —como el de Bolivia, España, Chile, Colombia, China y Canadá— que se encuentran debatiendo estrategias sobre cómo aumentar los impuestos a "quienes más tienen". ¿Lo lograrán? Eso el tiempo lo dirá.