Se puso tensa la cosa
Aunque en estos momentos al mundo no le hace falta más episodios de tensiones entre países, aun así Washington y Moscú nos regalaron uno nuevo este martes —14 de marzo— cuando un avión de caza ruso chocó en los aires del Mar Negro contra un dron estadounidense. Contándote el chisme más a detalle, resulta que dos aeronaves del Kremlin vieron al juguete pasearse sobre las aguas internacionales y no dudaron ni un segundo en interceptarlo y derribarlo. El caso es que uno de los aviones de combate chocó contra la hélice del objeto no tripulado.