Un incendio forestal empezó su devastación por la isla hawaiana de Maui desde el martes y continuó hasta este jueves, de acuerdo con las autoridades estadounidenses. Se trata de uno de los incendios más mortíferos del país en décadas. Y es que, al menos 53 personas fallecieron a causa del desastre.
Se sabe que las llamas se intensificaron por los vientos de un huracán que pasó por el Océano Pacífico, aunque las causas exactas aún no son claras. Para la mañana del jueves, la mayor parte del incendio se había contenido, gracias a las labores de los bomberos, pero aún había presencia de humo y cenizas, de acuerdo con las autoridades. De igual manera seguían las labores de búsqueda y rescate por parte del Ejército. Se abrieron dos refugios en la isla para atender a las personas afectadas y se esperaba evacuar ayer al menos a unos 1,500 turistas.
Quien habló este jueves sobre la situación fue el presidente Joe Biden, quien además de dar una declaración de desastre mayor, reconoció a las víctimas, a los rescatistas y aseguró que la isla tendrá todo lo que necesite para recuperarse.