Dos barcos de pesca con unas 1,200 personas refugiadas a bordo encendieron las alarmas europeas porque están a la deriva en las aguas del Mar Mediterráneo. Ante esto, la guardia costera italiana avisó que están llevando a cabo operaciones de rescate para que la situación no termine en una nueva tragedia de gente desplazada proveniente del norte de África. Según los reportes, una de estas embarcaciones está a 190 kilómetros de la ciudad siciliana de Siracusa y lleva a unas 800 personas consigo. El otro barco anda en el mar Jónico, frente a la costa de Calabria, con otras 400 a bordo.