Tokio es una ciudad enorme, aunque muy apretada; taaaanto que el gobierno japonés está ofreciendo un millón de yenes —unos 7,500 dólares— por hijo a las familias residentes de esta enorme urbe para que se muden cuanto antes. De hecho, la cifra aumentó pues primero habían ofrecido 300,000 yenes. La cosa es que las autoridades creen que se debe reducir la densidad de la población en la zona metropolitana y a la vez repoblar las regiones que han quedado abandonadas en el país a causa del envejecimiento y la migración de jóvenes a las grandes ciudades niponas. Esta medida entraría en vigor en abril.