Hace ocho años salí de la carrera. En ese momento no había movimientos estudiantiles feministas, no había personas que me arroparán y me acompañarán en mi proceso de violencia vivida, tampoco había espacios en donde se pudiera hablar de la importancia de los aspectos de género e inclusión en el espacio laboral.
Al salir de la universidad me encontré con un camino inhumano para cualquier persona, pero imposible para las mujeres. Nadie me dijo lo tortuoso que iba a ser, nadie me aviso lo complicado que es salir a trabajar en un mundo de hombres siendo mujer y tampoco me pasaron el memo de que la violencia laboral y de género en el trabajo son una constante de todos los días.
Me enfrenté al mundo laboral sola. Buscando las formas de adentrarme a temáticas sociales sin saber cómo hacerlo. Sin mucho acompañamiento y teniendo experiencias que rayaban en lo absurdo; como esperar a que llegue tu jefe a la oficina a las 12 de la noche nada más para “que te vea”, o no poder hacer ningún plan porque no sabes a qué hora vas a terminar. Constantemente buscando otro camino laboral enfocado en temas sociales, pero topándome con pared cada vez. Parecía ser que conciliar lo social con un trabajo remunerado era imposible.
Hoy, los tiempos están cambiando. Podemos encontrar en las universidades movimientos feministas, diferentes espacios seguros para las mujeres, cada vez más sensibilización en temas de género e inclusión dentro de las empresas y cada vez más espacios de trabajo en los cuales las causas sociales son parte de la esencia.
Fundar Lentes Púrpura fue un acto político basado en la experiencia de trabajar en lugares en los cuales mi salud mental y física se vio comprometida ampliamente. Lentes Púrpura se crea como una opción para aquellas personas que, como yo, se sentían pérdidas y no encontraban un camino profesional con las opciones más “tradicionales”. Nuestra misión es hacer que todas las personas logren alcanzar su mayor potencial y eso nos incluye a nosotras, quienes trabajamos en Lentes Púrpura.
Ha sido un desafío y no siempre lo hemos hecho bien, pero creemos que estamos en el camino correcto. Así es como con el patrocinio oficial de The Watson Institute y el apoyo de muchas otras empresas se crea el evento: Ponte los Lentes; un espacio de sensibilización, reflexión y conexión. Este es el espacio que hubiera querido tener al graduarme. Un espacio seguro para hablar de los temas más importantes que nos aquejan como personas y como sociedad. Pero también un espacio que permite conectar estudiantes de diversos contextos con empresas que están desde su área generando cambios en lo social.
Ponernos los Lentes Púrpura es la única manera de generar cambios desde la estructura, sostenibles, basados en la evidencia pero también en la empatía. Gracias por ser parte de este camino con nosotras. ¡Pongámonos los Lentes! Y sigamos cambiando vidas.