“Nadie está vivo”. Esas fueron las palabras de las autoridades en Nepal tras encontrar los restos del avión que se accidentó el fin de semana en las montañas del Himalaya. Como te contamos, los equipos de rescate hicieron hasta lo imposible para llegar con prisa al lugar de la tragedia, aunque ya esperaban lo peor. Y aunque las condiciones climáticas en la cordillera dificultaron la misión, por fin dieron con los restos de la nave y también, tristemente, con 21 cuerpos sin vida de las y los pasajeros y miembros de la tripulación que iban a bordo; solamente queda un cuerpo sin encontrar.