Los conflictos religiosos escalaron de nivel este jueves en Pakistán, donde el gobierno detuvo a más de 130 personas que atacaron varias iglesias cristianas. Todo empezó el miércoles, cuando corrió el rumor de que algunas personas que profesan el cristianismo estaban profanando páginas del Corán, el libro más sagrado del islam. Ante esto, una turba de cientos de musulmanes comenzó a atacar al menos cinco templos y varias casas de cristianos al este de Pakistán. Aunque no hubo heridos, el gobierno reconoció que se trata de uno de los enfrentamientos religiosos más serios en la historia reciente del país.