Hay un señor que, aunque tal vez no todos los sepamos, ocupa un lugar importantísimo para quienes vivimos viendo caricaturas en los dos miles: Genndy Tartakovsky. Un señor que nos dio bellezas como El laboratorio de Dexter; Samurai Jack; hartos capítulos de Las chicas superpoderosas; tres películas de Hotel Transylvania; y una de las mejores series animadas de Star Wars jamás creadas. Afortunadamente para nosotros, sigue produciendo cosas hermosas.
Hace unos años estrenó Primal, una de las mejores series animadas para adultos que he visto, y este mes llegó a HBO Max Unicorn: Eternal Warriors. Lleva cuatro capítulos y es la historia de un grupo de superhéroes en una Inglatera SteamPunk del Siglo XIX. ¿Lo interesante? Estos superhéroes han reencarnado durante más de mil años para derrotar a un mal cósmico desconocido. No obstante, esta vez algo sale mal.
Apenas lleva cuatro capítulos y ME ENCANTA.
No otra historia de superhéroes nada más
Sí, Unicorn: Eternal Warriors cuenta una historia de superhéroes más, porque al parecer Hollywood está obsesionado con el género (y lo estará todavía varios años más). Sin embargo, se siente diferente y se agradece. Creo que la principal razón es el estilo tan particular de Tartakovsky, que cuando le han dado libertad creativa ha logrado cosas maravillosas, balanceando escenas de acción con un ritmo muy particular, muy suyo, y secuencias largas con pocos diálogos (Primal prácticamente no tiene, por ejemplo); los personajes tan atractivos que presenta; y el universo que está construyendo.
Ese me parece el segundo mejor mérito de la serie (del primero hablaré a continuación): la construcción del universo. Aunque ya hemos visto mucho Steam Punk a lo largo de los años, no recuerdo nada reciente en un ambiente parecido. Aquí está construyendo la historia entre esta Inglaterra futurista y vieja, que por momentos se diluye con un mundo cósmico igual de importante, y la sinergia entre este universo con los personajes, hace que no pueda esperar para ver los siguientes capítulos.
Personajes al centro de la trama
Algo que he escuchado hasta el cansancio en el mes que llevo de curso de guion acá en Vancouver ha sido que siempre, siempre el personaje debe ser más importante que la trama. Esas son las mejores historias, y creo que es la razón por la que las películas recientes de Marvel han flaqueado tanto últimamente: porque, a diferencia de a sus inicios, no está encontrando la forma de construir personajes memorables (como Guardianes de la Galaxia, por ejemplo, que ha sido lo mejor que hemos visto en años).
Unicorn: Eternal Warriors está construyendo un universo narrativo increíble, pero que en vez de ser lo más importante de la historia, está al servicio de los personajes. La historia de una heroína reencarnada batallando con la dueña del cuerpo que le tocó en esta vida; el triángulo amoroso que esto implica; un niño con acceso a toda la sabiduría del cosmos. No sé cómo vayan a crecer estos personajes, pero no puedo esperar para verlo.