Sin duda a Estados Unidos le va a costar mucho sanar la herida del asalto al Capitolio que ocurrió el 1 de enero del 2021 con la intención de mantener al expresi republicano, Donald Trump, en el poder. Aunque, por lo menos, siguen cayendo los peces gordos responsables de aquel día. Tal es el caso de Stewart Rhodes, el líder de la milicia de extrema derecha Oath Keepers, que fue sentenciado este jueves, 25 de mayo, a 18 años de prisión por su papel en el ataque. Lo encontraron culpable por cargos de conspiración sediciosa en el Tribunal Federal de Distrito de Washington. ¡Ojo! Esto no es poca cosa, pues se trata de la pena más heavy que las autoridades judiciales han dado a los más de 1,000 casos abiertos por el asalto al Congreso estadounidense.