El único miedo que debería tener una niña o niño al irse a vacunar contra el COVID-19 es el de la inyección, pero en Puebla tal parece que también se deben preocupar por las balaceras. En un nuevo y penoso episodio de la violencia que azota al país, resulta que un tiroteo encendió las alarmas a las afueras de un centro de vacunación infantil ubicado en la capital de esta entidad, específicamente en el Centro de Salud Francisco I. Madero. Afortunadamente, ningún menor perdió la vida, aunque dos sí tienen heridas de bala junto con otros dos adultos. Las autoridades siguen investigando el caso.