Tras semanas de suspenso, el director de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón de la UNAM salió a dar el veredicto respecto al supuesto caso de plagio por parte de la actual ministra de la Suprema Corte de Justicia de México, Yasmín Esquivel Mossa, hacia su entonces compañero de derecho, Édgar Ulises Báez.
Así, después de que el Comité de integridad académica y científica de esa entidad llevara a cabo un análisis de ambos trabajos, la FES llegó a la conclusión de que la tesis que la ministra Esquivel presentó en 1987 es una “copia sustancial” de la publicada en 1986 por el exalumno Édgar Ulises Báez. O sea, confirmó el plagio. Así lo informó en un comunicado en redes.
¡Pero eso no es todo! También salió embarrada la profesora Martha Rodríguez Ortíz, quien asesoró a Esquivel en aquel entonces. Y es que la institución dijo que existe una posible falta a los principios éticos universitarios de su parte.
En el comunicado, la UNAM señaló que ambos casos, el de Esquivel y Rodríguez, “se turnarán a las instancias correspondientes para que se proceda conforme a la legislación universitaria". O sea, que otra instancia de la UNAM analizará cuáles serán las sanciones que se impondrán ante esta falta.
Por otro lado, informó que la normatividad de la UNAM no cuenta con los mecanismos necesarios para invalidar el título que se le otorgó a Esquivel hace 36 años. Es por ello que el contenido de la resolución del Comité de la FES Aragón ahora será enviado a la Secretaría de la Educación Pública para que puedan ver qué se puede hacer al respecto.
Ah y ¡ojo! que la Constitución dice que para ser ministro o ministra de la Suprema Corte de Justicia tienes que tener título en Derecho y “gozar de buena reputación”, algo que claramente Esquivel perdió dentro de todo este merequetengue.
A través del medio LatinUS el escritor Guillermo Sheridan publicó un artículo en donde, a través de numerosas pruebas, señaló que la ministra Yasmin Esquivel Mossa plagió su tesis universitaria en septiembre de 1987, tomando la de Édgar Báez. A partir de ese momento, empezó una lucha para defender su reputación, desatando una oleada de cuestionamientos respecto a quién era el o la autora original de la obra. Y bueno, ahora la UNAM ya se decantó en favor de Báez.
Como sea, échale un ojo a nuestra cobertura TLK del tema.
